Salvaje Pequeña
Salvaje Pequeña tiene una superficie de 0,3 km2. Es baja y está cubierta en su mayor parte por arenas orgánicas de origen marino. Por debajo hay aglomerados fonolíticos atravesados por varios diques, como en Salvaje Grande. En el extremo occidental sobresale un pequeño promontorio, Pico do Veado o Atalaia (49 msm), donde se encuentra otro faro. Durante la pleamar, una parte importante del sector oriental de la isla permanece sumergida. Se puede desembarcar por una playita situada al SO, si el estado de la mar lo permite. En primavera se monta una pequeña casa prefabricada para los guardas, que se desarma en otoño y se guarda en un foso ya preparado hasta la primavera siguiente.
Ilhéu de Fora, como la anterior, es baja y muy pequeña (0,1 km2) y está prácticamente cubierta por arenas orgánicas. Solamente destacan dos conjuntos rocosos, el más alto (15 msm) situado en el extremo SE. Hacia el N se extiende una larga plataforma poco profunda, de la que sobresalen algunos roques pequeños. Es el único lugar del mundo donde crece la tabaiba ermitaña (Euphorbia anachoreta), de la que apenas existe una treintena de ejemplares. En esta isla no hay ninguna construcción, y es muy difícil desembarcar en ella.