Musarañita (Suncus etruscus)
Con tan solo 35,0-53,0 mm de longitud cabeza-cuerpo, se trata del mamífero de menor tamaño de Europa y uno de los más pequeños del mundo. Se parece mucho a otras musarañas, aunque destaca por su cabeza proporcionalmente mayor y la cola más larga, que tiene cerca de la mitad de sus dimensiones corporales. La coloración es gris pardusca, resaltando sus grandes orejas y el hocico afilado, como es característico en otros sorícidos. La distribución mundial de este pequeño insectívoro abarca el norte de África, el sur de Europa y Asia central y suroccidental, tratándose de un elemento típicamente mediterráneo. En el ámbito de la Macaronesia tan solo está presente en Canarias, concretamente en Tenerife, donde ha sido introducido en tiempos muy recientes. Así, las primeras citas son de los años 1983-1984 y proceden del norte de la isla. Desde entonces se ha ido expandiendo por gran parte de su superficie, de forma que hoy en día aparece por toda la vertiente septentrional, algunas localidades del sur e incluso el Parque Nacional del Teide, a más de 2.000 m de altitud. Tiene preferencia por los ambientes antropizados de zonas bajas y medianías (cultivos, jardines, campos de golf, etc.), si bien llega a penetrar en masas boscosas de pinar y monteverde degradado y, más raramente, en el matorral de alta montaña, estando presente también en el cardonal-tabaibal y reductos de bosque termófilo. Se refugia bajo piedras, en muros y estercoleros, entre la “pinocha” o capa de acículas de pinos, etc. Su elevado ritmo metabólico le obliga a una gran actividad, sobre todo al crepúsculo y durante la noche, si bien puede ser observado con cierta frecuencia a pleno día. Es una especie eminentemente carnívora, capaz de consumir presas de notable tamaño (sobre todo insectos). No se dispone de datos referentes a su reproducción en Canarias, ya que es un mamífero muy poco estudiado. En otras áreas la hembra es capaz de producir tres camadas en un año, pariendo de 2 a 5 crías en cada una. Entre sus enemigos se encuentran el gato doméstico (Felis catus) y las dos rapaces nocturnas de Canarias, la lechuza común (Tyto alba alba) y el búho chico (Asio otus canariensis), pero sobre todo la lechuza, que las captura con cierta frecuencia. El análisis de sus egagrópilas ha ayudado a conocer mucho mejor la paulatina expansión de la musarañita en Tenerife